Ya sea que tu hijo tenga dolor de estómago, congestión nasal o una picadura de insecto, los médicos dicen que los remedios caseros pasados de moda suelen ser la mejor manera de ayudarlo a sentirse mejor rápidamente.
Estos tratamientos probados por el tiempo rara vez tienen efectos secundarios, cuestan casi nada y usan elementos que probablemente ya tenga a mano. Algunos, como el jengibre y la manzanilla, incluso han sido confirmados por estudios científicos por tener efectos curativos.
Jugo de Miel y Limón para el dolor de Garganta
Por supuesto, siempre debe llamar a su pediatra si el problema de su hijo parece grave. Pero la próxima vez que su hijo tenga un dolor o lesión leve, puede encontrar estas soluciones inteligentes en toda su casa.
El limón seca la congestión y la miel proporciona una capa relajante. De hecho, un estudio reciente encontró que una cucharada de miel alivia la tos de los niños incluso mejor que los medicamentos para la tos. Mezcle una cucharada de cada uno, cocine en el microondas durante 20 segundos hasta que esté tibio (no caliente) y haga que su hijo trague la mezcla una cucharadita a la vez. Precaución: la miel no es segura para bebés menores de 1 año.
Té de manzanilla para los cólicos
La madre de Peter Rabbit lo alimentó con té de manzanilla relajante en el cuento clásico de Beatrix Potter, y puedes dárselo a tu bebè para relajar sus músculos intestinales y calmarlo. Deje reposar el té durante cuatro a cinco minutos, déjelo enfriar a temperatura ambiente y luego ponga de una a dos onzas en una botella. No le dé a su bebé más de cuatro onzas al día para asegurarse de tener suficiente espacio en su estómago para la leche materna o la Formula.
Bicarbonato de Sodio para las picaduras de Insectos
Mi abuela solía hacerme una pasta de bicarbonato de sodio cuando era niña, y cuando la probé con mis propios hijos, dijeron que detuvo la picazón mejor que los productos comprados en la tienda. El bicarbonato de sodio alcalino ayuda a contrarrestar la hinchazón. Mezcle una cucharadita de bicarbonato de sodio con suficiente agua para hacer una pasta espesa, úntela sobre las picaduras y déjela secar.
Pimienta de cayena para hemorragias nasales
Esta especia ayuda a la coagulación de la sangre y se ha utilizado con fines medicinales en culturas de todo el mundo. Mantenga la cabeza de su niño erguida y presione sus fosas nasales durante varios minutos. Luego, espolvoree una pizca de pimienta de cayena molida en un hisopo de algodón humedecido y aplique dentro de la nariz en el área del sangrado. Parecería que puede picar pero, sorprendentemente, no es así
Cinta adhesiva para las verrugas
La cinta de tela gris parece irritar las verrugas, que pueden ser sorprendentemente rebeldes, e inhibir su crecimiento. Coloque un pequeño trozo de cinta sobre la verruga de su hijo, pero no tan apretado como para que le duela. Cambie la cinta cuando empiece a tener problemas; en aproximadamente un mes, la verruga desaparecerá.
Un burbujero para la ansiedad
Respirar lenta y profundamente ayudará a su hijo a relajarse cuando se sienta estresado. Haga que su hijo sople chorros largos y lentos de burbujas con el burbujero.
Un Paño Frio para los dolores de cabeza
Envolver varios cubitos de hielo en un paño de cocina ayudará a calmar el dolor de cabeza de su hijo (nunca coloque hielo directamente sobre su piel porque le quemará), pero le resultará difícil mantenerlo en su lugar durante mucho tiempo. Para evitar que el hielo envuelto en una toalla se resbale, presiónelo contra su frente o sienes y asegúrelo con un pañuelo atado en la parte posterior de su cuello.
Un Calcetín para el dolor de estomago o cuello
En lugar de comprar una envoltura térmica, haz una llenando un calcetín con arroz crudo y átalo, luego calienta el calcetín en el microondas durante un minuto o hasta que esté tibio y colócalo donde tu hijo tenga dolor.
Tu secador para dolor de oídos de nadador
Esta dolorosa inflamación del oído externo atrapa líquidos y posiblemente bacterias. Si el área se ha infectado, su pediatra probablemente le recetará gotas antibióticas. Pero para los casos leves, puede intentar evaporar el agua atrapada colocándose a un pie de distancia de su hijo y apuntando la secadora, en la configuración cálida (no caliente), a su oído.
Solución de lentes de contacto para la congestión
Para un niño mayor de 6 meses, llene una pera con solución salina sin conservantes, levante la cabeza y exprima suavemente la solución en una fosa nasal a la vez. (Hágalo en la bañera o sobre el fregadero).
Té de jengibre fresco para las nauseas
El jengibre detiene las contracciones del estómago que le dicen al cerebro de su hijo que siente náuseas. Para los niños de 2 años en adelante, agregue una cucharadita de jengibre fresco rallado a cuatro onzas de agua hirviendo y déjelo reposar durante cuatro a cinco minutos. Puede agregar un poco de miel para que sepa mejor. Una vez que se haya enfriado, pídale a su hijo que lo beba media hora antes de subirse al automóvil.
Pepino para la hinchazón leve
Si vas a un spa elegante, el facialista puede usar este alimento básico para ensaladas para aliviar la hinchazón alrededor de tus ojos. Eso es porque las rodajas de pepino frescas ayudan a calmar la piel caliente e hinchada. Puede colocar una rebanada en cualquier lugar donde su hijo tenga una hinchazón leve, y luego simplemente reemplazarla con otra rebanada del refrigerador después de que se caliente.
Una tarjeta de crédito para picadura de abejas
Si una abeja o avispa pica a su hijo, retire el aguijón para evitar que entre más veneno en la herida. Para evitar apretar el aguijón, que puede esparcir el veneno, use el borde plano de una tarjeta de crédito para raspar suavemente el área hasta que salga el aguijón.
Chicle para la indigestion.
Si su hijo tiene 4 años o más, pídale que mastique un poco de chicle cuando se queja de tener el estómago lleno después de una comida copiosa. "La saliva adicional que producirá neutralizará el problemático exceso de ácido del estómago.
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